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7, CLUB DEL GOURMET + E£Conte fig características, pero sobre todo movi- dos por el entusiasmo y la pasión com- partida por el campo y la naturaleza, estos jóvenes viñadores están influidos por las nuevas corrientes de elabora- ción, aunque, eso sí, con los pies en la tierra. La filosofía de A Pie de Tierra se basa en hacer los vinos que a Aitor Paul y David Villamiel les gusta beber. Partiendo del respeto al entorno y la tipicidad de la garnacha, y rin- diendo especial pleitesía a los suelos de granito, juntos trabajan la finca familiar de David: alrededor de veinte hectáreas distribuidas por el pueblo de Méntrida dibujando los valles del Alberche, que se complementan con otras cuatro hectáreas situadas dentro del cauce del mismo río, pero pertene- cientes al municipio limítrofe de Aldea del Fresno (Madrid). Un viñedo tradicional en el que la garnacha autóctona, plantada a mediados del siglo pasado a partir Aitor Paul y David Villamiel (de verde) embo- tellan la esencia de viejas viñas de garnacha para dar continuidad al trabajo y esfuerzo de generaciones. Fuerza Bruta es una garnacha fina y expresiva, fruto del cáracter del serrozr y de una variedad al alza. de injertos de viñedos viejos, sigue el sistema de cultivo de la zona: marco a tresbolillo con formación en vaso. Con la perspectiva de sacar adelan- te esta herencia vitivinícola, A Pie de Tierra apuesta por la desvinculación paulatina del sistema cooperativista, común aún en la zona. Su objetivo es no abandonar el campo, evitar perder unas cepas de gran potencial y dar (2 a on dt Floral, vibrante, aromático y expre- ye sivo, Fuerza Bruta JueragBri descansa en grandes so toneles de castaño y roble que multipli- can el entorno. continuidad al trabajo y esfuerzo de generaciones. O como asegura Paul: “Descartar la subsistencia como forma de vida en el entorno rural y dignificar algo de un valor incalculable”. VINOS PARA GUSTAR Mirando a Gredos desde los valles del curso medio del Alberche, la bodega apuesta por la garnacha para repre- sentar el carácter mediterráneo de la zona centro, a altitudes de dehesa y no de montaña. La personalidad de un paisaje con pronunciadas ondu- laciones de granito molido, laderas y lomas, en el que descansan unas viñas longevas, de montaña. Fuerza Bruta es el reflejo de todas estas singularidades, pero también una alegoría de la pasión de sus elaboradores. Un tinto proce- dente de un viñedo viejo de Aldea del Fresno trabajado de manera sosteni- ble, sin clarificar ni filtrar, que es una golosina en la boca. e
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